PELíCULA RECOMENDADA (Artículo incluido en la publicación Compromiso y Cultura)
Her
Spike Jonze (2013) – Estados Unidos
¿Os habéis parado a pensar en cuánto han cambiado los tiempos desde nuestra más tierna infancia hasta el día de hoy? Jugábamos en la calle, no teníamos móviles, así que para comunicarnos entre nosotros teníamos que vernos. En poco tiempo, llegaron los vídeo juegos, los ordenadores, los móviles… y nuestra forma de relacionarnos cambió para siempre. Nosotros que hemos tenido la oportunidad de vivir a caballo entre las dos épocas tal vez podamos valorarlo en su justa medida, pero ¿y nuestros hijos?. Por eso podría ser un buen ejercicio ver junto a ellos Her, la película que presentamos este mes, e intentar sacar alguna conclusión sobre el momento al que hemos llegado en el vertiginoso progreso tecnológico que nos ha llevado a este mundo «macro-comunicado».
Her nos cuenta la vida de Theodore, a punto de divorciarse y quedarse solo. Para mitigar su soledad se compra un nuevo sistema operativo de inteligencia artificial diseñado para satisfacer cualquier necesidad del usuario. Samantha, que así se llama la voz femenina del sistema operativo, y Theodore inician una relación que provocará cambios en la vida de este último.
Es bastante contradictorio que en plena era de la comunicación global sea cuando mayores cuadros de depresión sufre el hombre moderno. Nos sentimos solos cuando jamás hemos podido comunicarnos con tanta gente en tan poco tiempo. Menuda paradoja. El director Spike Jonze nos lo muestra con habilidad en esta película y nos adentra en un futuro distópico, que ya no es tan futuro, ni mucho menos utópico, tan sólo 6 años después de haberse estrenado esta película.
Her es sorprendente, brillante, emotiva, desasosegante. En clave de comedia va introduciéndonos en la humana mente de Theodore y la cibernética de Samantha. Con esa excusa el director nos va a hacer plantearnos cuál es la verdadera relación que tiene el ser humano con los avances tecnológicos y cuál podría llegar a ser. La película trata temas como la soledad, las relaciones humanas, los complejos o los miedos que se producen al romperse una relación, la necesidad de tener a alguien al lado o la de aislarse del mundo exterior y refugiarse en el cibernético.
Con una espléndida fotografía y unas impactantes imágenes de un mundo distópico, el peso de la película recae en Joaquin Phoenix, que como siempre está magnífico, y la voz de Samantha, interpretada por Scarlett Johansson. Poco más basta para que Her nos meta de lleno en esta historia ¿de amor? Juzgad vosotros mismos. Solo sé que poco después de ver la película, un escalofrío me recorrió el cuerpo cuando dentro de un ascensor alguien junto a mí se puso a hablar con el robot de su móvil. El futuro ha llegado: ¿las nuevas tecnologías nos ayudarán a sentirnos menos solos o acabarán deshumanizándonos? Denle una oportunidad a Her y quizás puedan responder.
Accatone.
PELíCULA RECOMENDADA (Artículo incluido en la publicación Compromiso y Cultura)
Black mirror. Serie de televisión.
Charlie Brooker (Creador), Owen Harris, Carl Tibbetts, Otto Bathurst, Euros Lyn, Brian Welsh, Bryn Higgins, James Hawes, Dan Trachtenberg, Jakob Verbruggen, James Watkins, Joe Wright, Jodie Foster, Toby Haynes, John Hillcoat, David Slade, Timothy Van Patten, Colm McCarthy (2011)- Reino Unido
Como ya he hecho en alguna ocasión anterior, voy a recomendar el visionado de una serie, en este caso la británica Black Mirror, que ya va por la cuarta temporada. Pero que el formato de serie no te engañe, cada capítulo de Black Mirror es totalmente independiente del anterior, es una nueva historia que solo tiene en común con las demás el tema tratado: la tecnología y cómo sus avances nos afectan en nuestras vidas, en nuestra manera de relacionarnos e incluso en nuestra manera de ser.
Los creadores de Black Mirror se posicionan claramente y nos presentan en cada capítulo un futuro distópico en el que los humanos, buscando la comodidad y la felicidad con la invención de nuevas tecnologías, lo que consiguen es un resultado bastante aterrador.
De los 19 capítulos que se han emitido hasta el momento, aunque hay alguno que puede estar un poco por debajo de los demás, la gran mayoría están a gran nivel. Si no os importa voy a destacar alguno, aunque como os digo os recomiendo ver la serie completa, y si es acompañada de vuestros hijos (seguramente más avezados que nosotros mismos en estas nuevas tecnologías), mejor que mejor.
El primer capítulo, quizás el más mediático de todos, titulado El himno nacional, es una corrosiva sátira de macabro humor en la que se despedaza la monarquía, la política y los medios de comunicación, y la utilización de los mismos para manejar a la opinión pública. Este capítulo fue emitido en abierto para todo el Reino Unido y tuvo una gran repercusión que hizo que los siguientes capítulos de Black Mirror fuesen esperados como agua de mayo.
El tercer capítulo, Tu historia completa, disecciona de manera magistral cómo las innumerables aplicaciones de los móviles consiguen hacerte sentir controlado, y su mala utilización puede provocar la destrucción de las relaciones entre las personas. Un oscuro futuro, que tal y como van avanzando las tecnologías de los gadgets, no queda tan lejos como pueda parecer. Inquietante capítulo.
Otro perturbador capítulo es Blanca Navidad, y qué mejores fechas que estas para verlo. En este caso se analiza qué nos puede pasar si abrazamos el uso de las nuevas tecnologías sin valorar el efecto que pueden causar entre nosotros y nuestros círculo de amistades.
Mi favorito es Caída en picado, en el que los «me gusta» que recibas en tus actividades diarias que cuelgas en tu perfil social, te hacen poder pertenecer a una escala social más elevada: cuantos más puntos, más facilidad para obtener lo que para ti sería una vida perfecta. Lo más aterrador acontece cuando esta misma semana nos enteramos que el gobierno chino ha presentado un proyecto que parece basado en este capítulo. Desgraciadamente la realidad supera la ficción.
Podría seguir destacando más y más capítulos, pero mejor os dejo que los veáis vosotros y saquéis vuestras propias conclusiones.
Accattone